subsidio 6
Fomentando la vida
Equipo de pastoral
Dentro de la catequesis uno de los valores que tiene que ser fomentado es el valor de la vida. Hago estas anotaciones luego de que me platicaran sobre el suicidio de un joven.
Hemos de estar atentos a la conducta de los muchachos, siendo sensibles a la edad y mentalidad de los alumnos, que se vuelven presa fácil de las influencias, positivas y negativas. El trato que tengamos como maestros va a ser fundamental a la hora del desarrollo de la personalidad en el niño y la niña.
Nuestra conducta va a ser el primer testimonio de sí a la vida, respetando a los chiquitines, ayudándoles a reconocerse amados por Dios y lograr que se sientan queridos y valorados por el maestro.
Es obvio que el trabajo de fomentar vida no es sólo de los maestros, un ambiente de suma importancia es la familia, en donde los niños se van dando a conocer. Es por ello menester entrevistarse con los papás para ubicar la realidad familiar del menor.
Otro contenido que se puede utilizar ampliamente en catequesis es el llamado a la vida. Toda persona estamos llamados a la vida, a vivir, a sentir, a apasionarnos, a caminar y proyectar. Hemos de ir acompañando a los niños en este proceso relevante de amar la vida.
Si los niños ven que los adultos queremos vivir y que vivimos con alegría los momentos a pesar de los avatares diarios, se irán contagiando de la fuerza viva, al igual, si ven que los adultos de manera amargada y desnutrida avanzamos en la vida, el chico o chica se llenará de esa mediocre forma de vivir.
Claro está que no sólo imitando los niños aprenden, toca al maestro, al catequista y al educador en general propiciar que, poco a poco el muchachito vaya entendiendo que tiene sentido vivir y estar presente en este mundo, en este momento de la historia del hombre.
Hemos de enseñarles a vivir con felicidad y sirviendo a los demás.
Subsidio 6
Equipo de pastoral
Dentro de la catequesis uno de los valores que tiene que ser fomentado es el valor de la vida. Hago estas anotaciones luego de que me platicaran sobre el suicidio de un joven.
Hemos de estar atentos a la conducta de los muchachos, siendo sensibles a la edad y mentalidad de los alumnos, que se vuelven presa fácil de las influencias, positivas y negativas. El trato que tengamos como maestros va a ser fundamental a la hora del desarrollo de la personalidad en el niño y la niña.
Nuestra conducta va a ser el primer testimonio de sí a la vida, respetando a los chiquitines, ayudándoles a reconocerse amados por Dios y lograr que se sientan queridos y valorados por el maestro.
Es obvio que el trabajo de fomentar vida no es sólo de los maestros, un ambiente de suma importancia es la familia, en donde los niños se van dando a conocer. Es por ello menester entrevistarse con los papás para ubicar la realidad familiar del menor.
Otro contenido que se puede utilizar ampliamente en catequesis es el llamado a la vida. Toda persona estamos llamados a la vida, a vivir, a sentir, a apasionarnos, a caminar y proyectar. Hemos de ir acompañando a los niños en este proceso relevante de amar la vida.
Si los niños ven que los adultos queremos vivir y que vivimos con alegría los momentos a pesar de los avatares diarios, se irán contagiando de la fuerza viva, al igual, si ven que los adultos de manera amargada y desnutrida avanzamos en la vida, el chico o chica se llenará de esa mediocre forma de vivir.
Claro está que no sólo imitando los niños aprenden, toca al maestro, al catequista y al educador en general propiciar que, poco a poco el muchachito vaya entendiendo que tiene sentido vivir y estar presente en este mundo, en este momento de la historia del hombre.
Hemos de enseñarles a vivir con felicidad y sirviendo a los demás.
Subsidio 6
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